Yael Cohen Braun: Una Mujer de Negocios que No Tiene Miedo de Ser Audaz

Yael Cohen Braun: Una Mujer de Negocios que No Tiene Miedo de Ser Audaz

Yael Cohen Braun es una empresaria que no tiene miedo de romper con lo convencional. Con un enfoque directo, ha transformado voces en la lucha contra el cáncer y más allá.

Vince Vanguard

Vince Vanguard

¿Alguna vez has oído hablar de Yael Cohen Braun? Si no lo has hecho, esta es tu oportunidad de conocer a una mujer que desafía estereotipos y versiones políticamente correctas del éxito en el mundo empresarial. Yael Cohen Braun es una exitosa empresaria canadiense—nacida el 4 de noviembre de 1986 en Sudáfrica—que ha demostrado que el coraje, firmeza, y un toque de irreverencia son las claves del éxito.

Yael se mudó a Canadá con su familia a la tierna edad de dos años. Se graduó en Ciencias Políticas en la Universidad de la Columbia Británica, algo que podría resultar un dato curioso considerando su éxito en el mundo empresarial. Sin embargo, lo que verdaderamente distingue a Yael no es solo su brillante carrera educativa, sino su capacidad para enfrentar retos de frente. No es del tipo de persona que se siente intimidada, y eso es exactamente lo que le ha permitido brillar en un mundo donde muchos prefieren mantenerse cómodos bajo lo políticamente correcto.

En 2009, su madre fue diagnosticada con cáncer de mama y, en vez de lamentarse, Yael decidió hacer algo grandioso con esa experiencia. Fundó "F*ck Cancer", una organización que rompe con las normas habituales de comunicación y sensibilización ante esta terrible enfermedad. Con un nombre que es todo menos convencional, Yael decidió confrontar el problema con una visión directa y su propio estilo, logrando captar las miradas de aquellos que no tienen miedo a las palabras fuertes y a los enfoques audaces. Así nació una plataforma que no solo ofrece información adicional a jóvenes adultos, sino que también los empodera para tomar decisiones informadas sobre su salud.

A través de su liderazgo, Yael ha logrado transformar "F*ck Cancer" en una voz poderosa dentro de la lucha contra el cáncer, mientras pone el foco en el diagnóstico precoz y en formas de prevención, algo que, según dice, necesita urgentemente ser atendido. No se trata de adaptar el lenguaje para complacer a quienes prefieren un entorno más "seguro", sino de sostener una conversación abierta y directa sobre temas que realmente importan.

Pero esto no acaba aquí. Yael es también conocida por su matrimonio con Scooter Braun, el famoso mánager de artistas como Justin Bieber y Ariana Grande. A través de su relación, ha demostrado que es posible mantener una unión fuerte y sana mientras cada uno persigue sus respectivas carreras sin tener que rendir cuentas a un círculo más amplio.

Ahora bien, algunos podrían pensar que alguien con su trayectoria se conformaría con eso, pero lo cierto es que Yael tiene un espíritu emprendedor inquebrantable. Además de "F*ck Cancer", es cofundadora de "Motherlucker", una comunidad online que ofrece información a las madres de manera fresca y directa, eliminando el innecesario pulido que caracteriza a muchas de estas plataformas.

Curiosamente, su enfoque no siempre es bienvenido por aquellos que buscan la suavización y la mediocridad discursiva. Su modo de enfrentar las normas ha hecho que muchos la critiquen, especialmente aquellos que prefieren que el status quo permanezca intacto.

En respeto de su espiritualidad, es judía, lo cual juega un papel importante en su vida, ya que asegura que su fe y sus valores la guían en momentos de prueba.

Además de su participación en iniciativas de cambio social, Yael ha demostrado ser una poderosa oradora pública. Ha hablado en eventos internacionales y en TEDx, desafiando a las mujeres—y a quien esté dispuesto a escuchar—para que luchen por lo que consideran justo, sin rodeos.

Yael Cohen Braun es un claro ejemplo de cómo una persona puede desafiar lo ordinario al ser auténtica y valiente, optando siempre por la vía que otros consideran arriesgada, pero que ella ve como el único camino hacia la satisfacción personal y profesional. En un mundo donde lo "políticamente correcto" puede a veces ahogar auténticas ideas y talentos, es refrescante ver alguien que sigue su propio compás y no teme ser diferente.