¿Por qué hablar de 'Tengo Tu Número', la novela de Sophie Kinsella? Bueno, para aquellos que no estén al tanto, es una comedia romántica que combina enredos tecnológicos con el clásico humor británico. Ahora bien, este libro es un claro ejemplo de cómo la literatura comercial puede tener sus puntos altos y bajos, y claramente resuena en nuestra cultura contemporánea, tan vinculada a la tecnología, pero también nos da un par de razones para reflexionar.
Empezamos con la trama. 'Tengo Tu Número' cuenta la historia de Poppy Wyatt, una joven fisioterapeuta que, en un evento inusual, pierde su anillo de compromiso y su teléfono al mismo tiempo. Para ponerle picante a su busca desesperada, Poppy encuentra un teléfono en una papelera, solo para descubrir que pertenece a Sam Roxton, un exitoso empresario. Decidir quedárselo para usarlo en su misión de recuperación del anillo no es solo cómico, sino que también abre la puerta a una gran cantidad de situaciones imposibles basadas en intercambios de mensajes de texto. Lo que algunos consideran un retrato hilarante del mundo moderno yo lo veo como una representación de la mentalidad actual de "todo es reemplazable", donde el compromiso y la responsabilidad brillan por su ausencia.
La figura de Poppy Wyatt es bastante interesante. Aunque Kinsella la escribe con mucho encanto, es un ejemplo perfecto de la generación que está teniendo problemas para separar lo personal de lo tecnológico. La protagonista confía casi toda su vida a un dispositivo. Esto debería ser una llamada de atención, pero para algunos, es solo parte del show. En un intento de ser simpática, ella se ve envuelta en situaciones cada vez más ridículas, lo que claramente es percibido como 'empoderamiento femenino'. Hay quienes podrían argumentar que este tipo de personajes solo refuerzan la idea de que las mujeres necesitan constantemente probándose a sí mismas a través de la aprobación externa, algo que muchos de nosotros encontraríamos problemático.
Por otro lado, Sam Roxton representa el típico empresario: serio, ligeramente arrogante y desconectado de los detalles personales. Sin embargo, Poppy sí logra sacudir su vida ordenada y, algunos osarían decir, aburrida. Aquí Kinsella parece querer enseñar que detrás de cada hombre exitoso hay un caos emocional esperando ser explorado, una narrativa bastante débil y estereotipada.
Centrémonos ahora en cómo Kinsella aborda el mundo corporativo moderno. La elección de la ambientación es una demostración más de cómo se espera que la vida profesional y personal se entrelacen sin problemas. Lo que podría verse como un comentario sutil sobre la invasión de la tecnología a nuestras vidas personales, podría también interpretarse como un enfoque irreflexivo de nuestra constante disponibilidad por medio del teléfono móvil.
El libro también toca el tema de la privacidad, mostrando cómo Poppy usa el teléfono para interferir en el trabajo de Sam y, finalmente, revelar ciertos secretos. Si bien podría parecer una crítica a nuestra pérdida de privacidad en la era digital, se presenta más como una serie de enredos cómicos sin una reflexión verdadera sobre sus implicaciones. Aunque el humor es una herramienta poderosa, uno podría quedarse con la sensación de que una oportunidad de hablar sobre un tema crítico se perdió en el camino.
El estilo de Kinsella es fluido y accesible, y tiene el mérito de atraer a una audiencia amplia. No obstante, es necesario decir que su simplismo podría interpretarse como un intento de evitar ahondar en el tipo de temas que requieren un poco más de reflexión crítica. Algunos podrían encontrar eso refrescante, pero para aquellos de nosotros que esperamos que la literatura ofrezca más, puede ser decepcionante.
Algunos de nosotros argumentaríamos que 'Tengo Tu Número', tras su fachada de entretenimiento ligero, no pretende ser más que eso, y ahí es donde radica su problema. ¿No deberíamos esperar algo más que sólo entretenimiento? Libros así alimentan al tipo de mentalidad de complacencia que algunos liberales preferirían perpetuar. Entre las risas y las situaciones hilarantes, el lector podría olvidarse de cuestionar o desafiar el statu quo que presenta.
En resumen, 'Tengo Tu Número' es una pieza entretenida que puede servir bien como una lectura ligera. Pero si buscas algo que deje un impacto más profundo, probablemente tendrás que explorar otros títulos. La obra es una llamada de atención a cómo nuestra sociedad moderna vive a través de dispositivos y cómo las decisiones superficiales tienden a simplificarse en nombre de la comedia. Tal vez, es un buen representante de cómo el entretenimiento actual evita la profundidad para beneficiarse de los clichés de moda.