Serian: El bastión conservador que molesta a los progresistas

Serian: El bastión conservador que molesta a los progresistas

Serian es un ejemplo de cómo el conservadurismo, arraigado en valores tradicionales y prácticas pragmáticas, ha liderado cambios positivos en esta circunscripción federal de Malasia.

Vince Vanguard

Vince Vanguard

Serian, la circunscripción federal de Malasia, es el hogar político para aquellos que valoran la tradición sobre las modas pasajeras, y no se andan con rodeos cuando de defender esos valores se trata. Localizada en el estado de Sarawak, Serian ha sido durante décadas un bastión de estabilidad y buen gobierno, un ejemplo claro de cómo liderar sin doblegarse a las presiones progresistas. Pues bien, quienes dicen que la política debe doblegarse ante las ideologías populares claramente no han prestado atención a lo que ocurre en Serian.

¿Y qué es lo que hace tan especial a Serian? Más que nada, es la firmeza de sus representantes. Desde que la circunscripción fue establecida para el Parlamento de Malasia en 1968, Serian ha sido representada por una serie de líderes que entienden que la función de un político es defender los intereses de su gente, no de seguir las agendas de moda. Aquí no se trata de cambiar opiniones como quien cambia de camisa, uno más de los hábitos que tanto gustan a los progresistas. En lugar de eso, hay un sentido de continuidad y una política orientada al desarrollo rural que ha traído resultados tangibles para su población.

Desde proyectos de infraestructura hasta el soporte al agricultor local, Serian ha sabido aprovechar la importancia de ser estratégicamente 'conservador'. ¿Facilitar el acceso a servicios básicos? Hecho. ¿Promover el desarrollo económico local sin imposiciones externas? Absolutamente. Todo esto es posible porque aquí no se tiembla ante lo que otros puedan decir, sino que se actúa siguiendo un plan previsiblemente eficaz y tradicional. Esta previsibilidad es precisamente la virtud de los conservadores: saber qué hace falta hacer y luego simplemente hacerlo, sin complicaciones.

En materia política, Serian ha mantenido una afiliación clara con el Parti Pesaka Bumiputera Bersatu (PBB), uno de los componentes de la coalición Barisan Nasional. Gracias a su liderazgo, durante las elecciones, Serian ha sabido resistir la tentación de ceder a las oscilaciones ideológicas de las que tanto gustan los adversarios políticos. Aquí, la transparencia y la responsabilidad al electorado van de la mano con la prudencia financiera, lo que ha logrado un equilibrio que muchos otros podrían envidiar, si apenas considerasen saber que es la autodisciplina política.

La gente de Serian valora la coherencia y la responsabilidad. En esta región, el gobierno no se pierde en experimentos irresponsables que prometen mucho y cumplen poco. Se enfoca en lo que importa, con respeto y constancia. La política de Serian demuestra que no necesitas ser un cambiaformas ideológico para mejorar la vida de tus ciudadanos. La democracia, después de todo, es para los votantes, no un taburete para los políticos ambiciosos buscando la siguiente cosa "sin precedentes" para curiosear.

Es este el conservadurismo pragmático de Serian lo que impulsa una ruta densamente trazada hacia el desarrollo. Los líderes de la región no han sido tímidos a la hora de abordar cuestiones de infraestructura crítica, como la renovación de carreteras y mejoras a los sistemas de suministro de agua y electricidad, asegurándose de que ni una aldea quede exceptuada de los beneficios del progreso. Esto es afirmar sin titubeos que para quien cree que el progreso llega a través del cambio constante y sin rumbo, apenas podrían estar más equivocados. Serian continúa prosperando mientras otros se pierden en el ruido del cambio por cambio mismo.

Por supuesto, hablar de medios de vida es importante. La agricultura no solo es un pilar económico sino cultural en Serian. Proteger y promulgar leyes y políticas que aseguren recursos y apoyos a los agricultores ha sido una tarea clave, sosteniendo un nivel de autosuficiencia que muchos otros distritos apenas comienzan siquiera a contemplar. En vez de buscar cortoplacismo, Serian enfoca sus esfuerzos en previsión, invirtiendo en educación agrícola y tecnología para fomentar el desarrollo sostenido. Para clamores de granjas disruptivas con estética futurista, Serian responde con ciencia agrícola educada que pies en la tierra —nunca mejor dicho.

Finalmente, cualquier crítica a Serian se desvanece frente a su medida sencilla pero crucial: mantener la distancia correcta frente al juego de las presiones improcedentes. Cuando otros corren tras el aplauso fácil, Serian pisa seguro, firme, porque en sus venas corre la certidumbre de una política anclada en convicciones y no en aspiraciones.