Rurouni Kenshin: El Infierno de Kyoto que los Progresistas No Quieren que Veas
¡Prepárate para una explosión de acción y drama que hará que los progresistas se retuerzan en sus asientos! "Rurouni Kenshin: Kyoto Inferno" es la segunda entrega de la trilogía de películas japonesas basada en el popular manga de Nobuhiro Watsuki. Estrenada en 2014, esta película nos lleva a la era Meiji en Japón, donde el ex asesino Battousai, ahora conocido como Kenshin Himura, debe enfrentarse a un nuevo enemigo que amenaza con sumir al país en el caos. La historia se desarrolla en Kyoto, un lugar cargado de historia y tradición, y es aquí donde Kenshin debe detener a Shishio Makoto, un villano que busca derrocar al gobierno y sumir a Japón en un infierno de violencia.
¿Por qué esta película es un problema para los progresistas? Primero, porque celebra la tradición y el honor, valores que parecen estar en peligro de extinción en el mundo moderno. Kenshin, a pesar de su oscuro pasado, busca redimirse y proteger a los inocentes, un concepto que desafía la narrativa de que el pasado siempre debe ser condenado sin posibilidad de redención. En un mundo donde la cultura de la cancelación está a la orden del día, Kenshin representa la idea de que las personas pueden cambiar y mejorar, algo que no encaja con la mentalidad de "una vez malo, siempre malo".
Además, "Rurouni Kenshin: Kyoto Inferno" no se anda con rodeos cuando se trata de mostrar la brutalidad de la guerra y el costo de la violencia. La película no se disculpa por mostrar escenas de acción intensas y coreografías de lucha impresionantes, algo que podría hacer que los defensores de la corrección política se sientan incómodos. En lugar de suavizar la realidad, la película la enfrenta de frente, mostrando que a veces la violencia es necesaria para proteger lo que es justo y verdadero.
La película también desafía la noción de que el gobierno siempre sabe lo que es mejor para el pueblo. Shishio Makoto, el antagonista, es un producto de un gobierno corrupto que lo traicionó y lo dejó por muerto. Su deseo de venganza es un recordatorio de que el poder absoluto corrompe absolutamente, y que los ciudadanos deben estar siempre vigilantes para proteger sus libertades. En una época donde muchos parecen dispuestos a entregar sus derechos a cambio de una falsa sensación de seguridad, "Rurouni Kenshin: Kyoto Inferno" nos recuerda que la libertad no es gratuita y que siempre hay que luchar por ella.
Por último, la película es un testimonio del poder de la individualidad y la autodeterminación. Kenshin no sigue ciegamente las órdenes de nadie; él toma sus propias decisiones basadas en su código moral personal. En un mundo donde se nos dice constantemente que debemos conformarnos y seguir la corriente, Kenshin es un faro de esperanza para aquellos que creen en la importancia de pensar por uno mismo y actuar según sus propias convicciones.
"Rurouni Kenshin: Kyoto Inferno" es más que una simple película de acción; es un desafío a las narrativas modernas que buscan reescribir la historia y suprimir la individualidad. Es un recordatorio de que el honor, la redención y la libertad son valores que valen la pena defender, incluso cuando el mundo parece estar en contra. Así que, si estás buscando una película que no solo te entretenga, sino que también te haga reflexionar sobre el estado actual del mundo, no busques más. Esta es la película que necesitas ver.