¡Que Llegue la Noche! La película que los progres no quieren que veas

¡Que Llegue la Noche! La película que los progres no quieren que veas

Seamos honestos, ¡el verdadero toque de queda de las ideas es cuando aparece una película como 'Que Llegue la Noche'! Esta obra de suspenso dirigida por un cineasta mexicano en el 2023 aborda un México futurista lleno de tensiones.

Vince Vanguard

Vince Vanguard

Seamos honestos, ¡el verdadero toque de queda de las ideas es cuando aparece una película como 'Que Llegue la Noche'! Esta obra de suspenso, dirigida por un innovador cineasta mexicano en el 2023, no solo oscurocita los corazones, sino que ilumina las mentes que buscan más allá de la superficialidad y el adoctrinamiento progresista del cine moderno. La trama se desenvuelve en un México futurista donde las tensiones políticas y sociales han llegado a un punto de ebullición. La película se estrenó en septiembre de 2023 y rápidamente se convirtió en tema de conversación, especialmente entre aquellos que no temen expresar opiniones contrarias a las impuestas por el establishment.

La historia gira en torno a un periodista valiente, quien decide investigar una serie de desapariciones sospechosas en un entorno urbano cada vez más represivo. Es un llamado de atención, un grito de libertad, un recordatorio de que la noche puede ser oscura, pero está llena de estrellas para quien osa mirar hacia arriba. 'Que Llegue la Noche' revela las intrincadas redes de poder y manipulación escondidas detrás de las fachadas tradicionales y políticamente correctas.

La película goza de una narrativa de ritmo ágil, quizás demasiado para quienes prefieren que los personajes beban café y tengan largas conversaciones artísticas sin solución alguna. La dirección es audaz, dejando que las escenas hablen por sí solas, sin narradores condescendientes que nos traten como si fuéramos incapaces de pensar por cuenta propia. Los diálogos son reales, sin el acostumbrado filtro de lenguaje políticamente correcto.

Este es un thriller que no teme exponer lo im-pre-sen-ta-ble: el lado oscuro del creciente autoritarismo disfrazado de progreso. ¿Tendrá miedo el espectador promedio de enfrentarse con las verdades que poco se mencionan? Seguramente más de uno saldrá de la sala con ganas de comentar en redes sociales lo insólito que parece ser una película que trata al público como adultos.

¿Y qué hay de ese protagonista? El periodista no es un mártir al estilo de las historias liberales, sino un luchador que busca la verdad sin esperar premios ni reconocimientos. La trama nos arrastra a un mundo donde él se convierte en testigo y partícipe del conflicto, y nos cuestiona si realmente estamos cómodos con lo que creemos. Esta es una cinta que obliga a mirarse al espejo, incómoda quizás, pero honestamente necesaria.

La película también es un festín visual. No se trata de efectos especiales exagerados, sino de una cinematografía que honra la tradición del buen cine mexicano, destacando las vibrantes calles, los oscuros callejones y los imponentes edificios. Imágenes que hablan por sí solas. El espectador siente que las escenas le están susurrando secretos, si tan solo se atreve a escucharlos.

'Que Llegue la Noche' no solo entretiene, sino que desafía. Ofrece una perspectiva rara pero vital en una industria cada vez más preocupada por agradar al grupo de turno que grita más fuerte. Es hora de que las narrativas que exploren los límites del pensamiento se celebren, no se censuren. Después de todo, ¿qué mejor manera de pasar una noche que viendo algo que haga replantearse las cosas, en lugar de simplemente asentir con la cabeza frente a un contenido masticado?

Para quienes buscan alguna polémica fabricada como tantas otras veces, les tomará por sorpresa que nada en esta película está hecho para complacer agendas más amplias. En cambio, se arraiga en resaltar los matices de personajes complejos, situaciones realistas, y dilemas morales que invitan a la reflexión sobre lo que significa vivir en un mundo sacudido por el cambio continuo.

Finalmente, 'Que Llegue la Noche' nos deja con ese gusto por el cine que es valiente, que se arriesga por ser genuinamente subversivo y estimulante. A veces, lo que la crítica teme admitir es que algunos de nosotros preferiríamos alzar la vista a las estrellas antes que mirar siempre al suelo.