¡El Despertar de la Verdad en "Native New Yorker"!

¡El Despertar de la Verdad en "Native New Yorker"!

El cortometraje 'Native New Yorker' de Steve Bilich destaca la importancia de recordar y honrar la historia de los nativos americanos en la moderna ciudad de Nueva York.

Vince Vanguard

Vince Vanguard

¡El Despertar de la Verdad en "Native New Yorker"!

En 2005, el cineasta Steve Bilich nos regaló una joya cinematográfica llamada "Native New Yorker". Este cortometraje, filmado en la vibrante ciudad de Nueva York, sigue a un chamán nativo americano mientras recorre las calles de Manhattan. ¿Por qué es relevante? Porque nos recuerda que, a pesar de la modernidad y el bullicio de la gran ciudad, las raíces y la historia de los verdaderos nativos de esta tierra no deben ser olvidadas. En un mundo donde la corrección política y la cultura de la cancelación intentan reescribir la historia, este filme es un recordatorio visual de la verdad que muchos prefieren ignorar.

"Native New Yorker" es una obra maestra en blanco y negro que captura la esencia de una ciudad que nunca duerme. Pero más allá de su estética, lo que realmente destaca es su mensaje. En una época donde se nos dice que debemos sentirnos culpables por el pasado, este cortometraje nos invita a reflexionar sobre la verdadera historia de América. ¿Por qué deberíamos sentirnos culpables por algo que ocurrió hace siglos? La historia es historia, y no podemos cambiarla, pero sí podemos aprender de ella.

El chamán, interpretado por el actor Terry "Coyote" Murphy, nos lleva en un viaje a través del tiempo y el espacio, recordándonos que antes de los rascacielos y las luces brillantes, esta tierra pertenecía a los nativos americanos. Es un recordatorio de que, a pesar de los intentos de algunos por borrar o reescribir la historia, la verdad siempre encuentra su camino. Y es que, en un mundo donde la narrativa dominante intenta silenciar ciertas voces, "Native New Yorker" se alza como un grito de resistencia.

Este cortometraje es una bofetada a la corrección política. Nos muestra que no todo es blanco o negro, y que la historia de América es mucho más compleja de lo que algunos quieren hacernos creer. En lugar de sentirnos culpables, deberíamos sentirnos orgullosos de la rica y diversa historia de nuestro país. "Native New Yorker" nos recuerda que la historia no es algo que deba ser temido, sino celebrado.

La música, compuesta por William Susman, acompaña perfectamente las imágenes, creando una atmósfera que nos transporta a un tiempo en el que la tierra era sagrada y respetada. Es un recordatorio de que, a pesar de los avances tecnológicos y la modernidad, hay valores que no deben ser olvidados. La conexión con la tierra y el respeto por la naturaleza son principios que deberíamos volver a abrazar.

En un mundo donde las estatuas son derribadas y los libros son censurados, "Native New Yorker" es un faro de esperanza. Nos muestra que, a pesar de los intentos de algunos por borrar el pasado, la verdad siempre prevalece. Es un llamado a recordar y honrar a aquellos que vinieron antes que nosotros, y a no dejarnos llevar por la narrativa dominante que intenta dividirnos.

Así que, la próxima vez que camines por las calles de Nueva York, recuerda que estás pisando tierra sagrada. Una tierra que tiene una historia rica y compleja, una historia que no debe ser olvidada. "Native New Yorker" es más que un cortometraje; es un recordatorio de que la verdad siempre encuentra su camino, a pesar de los intentos de algunos por silenciarla.