El 2018 fue un año que abrió muchas cámaras de eco político, pero mientras todos discutían sobre paredes y políticas, los Morehead State Eagles de fútbol americano estaban demostrando que los valores tradicionales de esfuerzo y dedicación aún importan. Este equipo de Morehead, Kentucky, desafiaba las probabilidades en un deporte dominado por grandes escuelas, reconfirmando que a veces, David aún puede enfrentarse a Goliat.
Los Eagles, bajo la dirección del entrenador Rob Tenyer, participaban en la Pioneer Football League, una conferencia compuesta por programas de fútbol americano universitario sin becas deportivas. Yes, estudios por méritos no por política. Este enfoque resta importancia al aspecto monetario, nivelando el campo para aquellos verdaderamente apasionados por el deporte. En una era donde todo parece estar en venta, este hecho por sí solo es digno de nota.
A medida que la temporada avanzaba, los Eagles mostraron determinación. Aunque sus cifras finales no fueron exactamente lo que uno podría llamar de campeonato, su espíritu guerrero fue admirable. Lección para los chicos y profesores de hoy: el carácter no se mide solo en victorias. En su primer partido de la temporada, se enfrentaron a Eastern Kentucky y, aunque perdieron, se llevaron consigo la experiencia de enfrentarse a un equipo de la segunda división que sí ofrece becas. El aprendizaje no tiene precio.
La ofensiva de los Eagles fue conducida por quarterback Lawson Page, quien aportó tanto en el juego aéreo como en el terrestre. Su habilidad para liderar combina preparación más que retórica, y sus estadísticas lo avalan: 2065 yardas de pase y 21 touchdowns, más 628 yardas por tierra. Sorprendente cuando tu equipo no es gran cosa, ¿verdad? Page fue el líder absoluto no solo en el campo sino también fuera de él, demostrando que el liderazgo no necesita tantas cámaras para brillar.
El estratega defensivo de la temporada, Vincent Winey, mostraba que el juego no es solo de nombre sino de sudor. Registró 85 tackles, cinco de ellos para pérdida de yardas y defendió las mejores jugadas de los contrincantes. Tanto él como el resto de los jugadores enseñan lo que pasa cuando el trabajo duro se prioriza sobre el ruido constante que nos rodea.
Uno de los momentos más memorables de la temporada ocurrió cuando los Eagles lucharon contra los Butler Bulldogs, logrando una victoria después de ir perdiendo. Este juego en particular destacó por demostrar la capacidad del equipo de no rendirse, incluso cuando las cosas se veían sombrías. No se trata solo de ganar; se trata de luchar hasta el final, que es más de lo que podemos decir de algunas de las instituciones políticas.
Detrás de cada equipo está el sólido trabajo del entrenador. Rob Tenyer, quien ha sido parte del equipo desde 2013, cumplía su sexta temporada como entrenador principal en 2018. Es dentro de modelos como él que la generación más joven encuentra una guía adecuada. Tenyer unifica el equipo con su estrategia concentrada y un enfoque de "jugar limpio y ganar" que a muchos parece importar cada vez menos.
Además del desarrollo de sus jugadores en el campo, Morehead State se enfoca en inculcar cualidades fuera de él. La importancia de una buena educación suena desaliñado para algunos, pero este programa les incentiva a sobresalir académicamente, realizando esfuerzos que van más allá de una simple puntuación en el marcador. En resumen, ellos piensan más allá del "ahora", lo cual no siempre se ve en cada rincón de nuestra cultura social.
Los Eagles, aunque tal vez no tengan el mismo nivel de cobertura mediática que programas más grandes, son un recordatorio de lo que el espíritu deportivo puro y el sentido común pueden lograr. Su temporada de 2018 mostró cómo, con pocas becas y recursos limitados, el espíritu americano de lucha y dedicación aún puede prosperar. Aquellos que lo desestiman deberían echar un vistazo más cercano: la inspiración y la motivación no son propiedad de gigantes, sino de quienes levantan grano a grano.
Emular la dedicación de un equipo como Morehead State Eagles 2018 es una lección válida. Volvamos a lo que cuenta de verdad: familias fuertes, educación sólida y la promesa de que mientras sigas esforzándote, hay algo llamado el sueño americano. Los problemas comenzarán a resolverse por sí mismos cuando pongamos los valores correctos primero. Tal vez haya quienes no estén de acuerdo y llamen esto un cliché del pasado, pero los que entienden de qué se trata el esfuerzo nunca dejarán de luchar en el campo, al igual que los Eagles de ese célebre 2018.