¿Has oído de "Contando hasta Cero"? Si no es así, estás a punto de sumergirte en una historia que se desarrolla en la esfera política. Hablemos de este libro que mantiene a más de uno en piezas, y no precisamente por su originalidad literaria, sino porque parece un viaje a través de lo absurdo disfrazado de narración creativa. Es una novela de Gerardo González, publicada en España en 2023, que cuenta la historia de un grupo de personajes que desafían las leyes de la lógica matemática en una sociedad que hace malabares con las normas básicas. La novela se desarrolla en una ciudad ficticia, pero no es difícil relacionarla con las tendencias actuales que lideran el discurso político.
"Contando hasta Cero" trata de un grupo de personajes que, hartos de la banalidad del mundo que los rodea, deciden contar hasta cero. Literalmente. Pero, esperen un momento, eso no es lo impresionante. Lo que realmente preocupa es cómo esta filosofía ilógica encuentra seguidores. Uno pensaría que algo tan enloquecedor sólo existiría en las mentes más excéntricas, pero la sociedad que retrata González parece una parodia increíblemente cercana de lo que estamos viviendo hoy.
Una de las cosas que más llama la atención es la manera en que el autor expone la sociedad moderna, sugiriendo que muchas de las políticas actuales parecen seguir el mismo sinsentido que sus personajes. Hay que admitir, separar el mundo ficticio del real puede convertirse en una tarea complicada. Este libro parece gritar a los cuatro vientos que la irracionalidad anda suelta, e invita a reflexionar sobre el sin sentido que parece dominar el discurso social actual.
Tal vez lo que realmente quiere decir González con su analogía de contar hasta cero, es que algunas ideologías parecen estar impulsando un retroceso mental alarmante. Mientras que algunos lo aplauden como una brillante sátira, para otros resulta evidente que es una crítica mordaz a ciertas tendencias políticas. Incluso podría sugerirse que espolea esa mentalidad acomodaticia que algunos abrazan con entusiasmo, rechazando cualquier tipo de tradición o valor que huela a lógica o razón.
El libro se convierte en un manual de cómo no hacer las cosas. Sinceramente, alguno podría pensar que ciertos líderes políticos han leído "Contando hasta Cero" y han tomado notas para su próxima campaña electoral. Este tipo de literatura debe servir como advertencia. Está claro que el autor quiere que nos demos cuenta de lo ridículo que puede llegar a ser el camino que estamos siguiendo.
González es un autor que no tiene pelos en la lengua, tira el guante y no tiene miedo a la polémica. Para aquellos que disfrutan de una buena sacudida a las verdades establecidas, este libro es un banquete. La honestidad brutal del autor al igual que su astucia son evidentes conforme pasas las páginas. La habilidad de González para ridiculizar la absurda lógica reinante es verdaderamente un arte.
Quizás lo más provocador sea cómo el libro ilustra, de manera casi cínica, la rapidez con la que las personas pueden ser seducidas por una narrativa ilógica. Es esencial reconocer los males de seguir ciegamente un discurso vacío de sustancia. Algo que va en contra de los valores que, tristemente, parecen estar cada vez más en segundo plano.
Con "Contando hasta Cero", queda claro que estamos ante una sociedad que a menudo prefiere el caos a la coherencia. González, a través de su relato, no solo apunta a la audiencia para que vean el absurdo, sino que les tiende un espejo y les muestra cómo contribuir para cambiar las cosas. Quizás sea hora de contar hasta diez antes de tomar ciertas decisiones, de valorizar las tradiciones que nos definen, pero eso queda fuera del alcance de quienes prefieren la irrealidad.
Curiosamente, la narrativa de "Contando hasta Cero" toca la fibra sensible de aquellos que creen firmemente que no se puede construir un futuro renunciando al sentido común del pasado. Aunque la parodia pueda parecer una burla superficial, es, de hecho, una advertencia oculta para aquellos que creen que todo va bien. Si algo deja claro González, es que el sentido primario y la inteligencia no son enemigos del progreso.
En fin, "Contando hasta Cero" es una lectura que todo el mundo debería tomarse con humor, pero sin dejar de lado el análisis serio. Podemos aprender mucho sobre la confusión actual y lo que podría significar prepararnos para un retorno a los fundamentos. Aunque los liberales a menudo eviten visiones tan incómodas, a veces es necesario un libro como este para recordar que no se puede contar hasta cero sin llegar a un punto muerto.